domingo, 30 de octubre de 2016

el poder de la palabra

Hoy se nos recuerda el poder de la palabra. Es verdad que con la palabra podemos hacer mucho bien pero también mucho mal. Las palabras pueden ser usadas para unir, para construir. Y también para separar y destruir. “Trato de curar y no herir”, dice el antiguo mantram de unificación, y es bueno recordarlo con frecuencia para actuar en consecuencia. Hablar bien, hablar lo justo, hablar desde la ecuanimidad y del equilibrio, hablar desde el amor, es asignatura que la mayoría de los humanos tenemos pendiente en diferentes grados. Y así como el sonido de la voz de los niños nos cura, nuestra palabra puede también ser curativa. Trabajo hermoso el que tenemos por delante. Hay mucho que hablar sobre los poderes de la palabra: cómo crea formas, cómo actúa sobre los órganos psíquicos y físicos no sólo de aquellos que ella menciona, sino también de aquellos que la pronuncian y de aquellos que la escuchan. Saber ser justos, moderados y precisos con sus palabras, es una de las mayores cualidades que existen. Así cómo escribimos con una pluma, también escribimos con la lengua. Cada palabra es ya una carta que se dirige no sólo a los seres humanos, sino a todas las entidades que habitan la naturaleza. Cualesquiera que sean las criaturas, debemos esforzarnos en hablarles con una lengua de oro. Sí, porque la lengua de los humanos puede ser de diversos materiales: plomo, cobre, hierro, estaño, plata y oro. Una lengua de oro ilumina y calma las almas.

9 9 5

995 Hace doce años, encontré un documento que explica el uso del numero 995 como la Sagrada Geometría numérica de codificación diseñada para bendecir los alimentos y que vibracionalmente es similar a la la vibración del Cristo. A medida que cambia nuestro cuerpo y se llena con más y mas luz, la vibración de las cosas que comemos, bebemos y nos rodea se vuelven mas importantes a medida que somos mas sensibles a las vibraciones. He aplicado el 995 a muchas cosas y trabaja la mayoría de las veces (no siempre en la electrónica). Desde que trabajo con el agua, me doy cuenta que toda lo el agua que compro puede ser PURA, pero la energía no está allí. Imagínese cuántas veces el agua que está en el planeta ha sido reciclada. Me encontré que por la bendición del agua con el 995, la negatividad es eliminada de la misma, luego, el siguiente paso es pedirle al espíritu del agua que se eleve a su máximo potencial. De esta manera usted puede transformar TODA el agua a su alrededor, la botella de agua, el agua del grifo, el agua de pozo, río, lago, etc. a su máxima expresión. Nuestro cuerpo se compone de más de 70% de agua y el cerebro de más del 90%. Haga la prueba y pruebe la diferencia. Usted llevará su cuerpo entero a un estado aún mejor del que se encuentra. Dele a sus mascotas, plantas y observe. Por supuesto, también puede bendecir los alimentos que come, la ropa que usa, la casa donde usted vive, el coche, etc. Hacer la bendición de una persona o animal que tienen un desequilibrio es de gran ayuda. También hago la bendición cuando veo imágenes de desastres. Todo lo que hacemos para disolver la dualidad y lograr la unidad es nuestra prerrogativa como hijos de Dios. Vamos a hacerlo. Esta antigua codificación significa: El primer 9… disolución El segundo 9… dualidad El 5… el poder del uno El círculo de las agujas del reloj es para reestablecer la energía. ¿Cómo hacerlo? Realizar un círculo con la mano alrededor de la comida, agua, etc. en el sentido de las agujas del reloj y decir 9-9-5, tres veces. No sólo en sentido horario, tambien realizarlo en sentido antihorario, asi trabaja la energia ying y yang. Luego, pídale al espíritu o energía del agua o comida, que lo lleve a su máximo potencial. Eso es todo. Cualquiera puede hacerlo. Se trata de una cuestión de elección y toma de conciencia EXTRAIDO DE LA WEB

PORQUE EL HOMBRE NO PUEDO SER TAN BUENO

La bondad, la armonía, la plenitud en la vida pasan por el conocimiento de uno mismo. Mientras no haya un mínimo conocimiento del yo, de nuestro ego y sus mil caras es muy difícil que se den la bondad y la armonía porque estas se derivan, son la consecuencia, de la consciencia. Comprender nuestra condición humana es ver nuestro pensamiento, nuestras emociones y todos los traumas y bloqueos que nos condicionan y eso es mucho ver porque habitualmente evitamos ese encuentro con nosotros mismos. ¡Craso error! Debemos mirar o mejor habría que decir “contemplar” esa realidad interna para que pueda diluirse. “Conócete a ti mismo” es la frase que está grabada en piedra en el famoso Oráculo de Delfos donde acudían los griegos en la antigüedad a consultar al dios Apolo. Cualquier cambio en nuestra vida pasa por conocernos a nosotros mismos y eso sólo podemos hacerlo por medio de la observación silenciosa de nuestro pensar y sentir. También contemplando nuestras relaciones con los demás, ellos son espejos que nos muestran lo más profundo de nosotros mismos. Las energías que nos mueven son parte de nuestro ADN , una herencia genética con paquetes de datos que conforman nuestro cerebro, nuestras ideas, nuestro mundo emocional. Hay que ver los barrotes de esa cárcel como en el Mito de la Caverna de Platón donde los prisioneros viven en el mundo de las sombras, nosotros también estamos atrapados en nuestro propio condicionamiento, repitiendo siempre los mismos patrones en diferentes experiencias. ¡Mírate, date cuenta de ello!. La diferencia entre un hombre sabio y por tanto bueno y otro que no lo es radica en haberse dado cuenta de esta realidad en su vida. La luz de la conciencia es darse cuenta de ello; la bondad, la armonía y la paz son una consecuencia de haber despertado y estar más allá del estado habitual en que vive un ser humano inconsciente . El silencio, el contacto con la Naturaleza y la introspección son las herramientas para comprender nuestra esencia y situarnos en ella, poder vivir desde ella y salir del engaño de “matrix” a un mundo de plena consciencia y por tanto de lucidez. Nunca te olvides que nuestra verdadera condición es la luz y nuestro cometido reflejar esa luz en nuestra vida diaria. La plenitud interna vendrá sola y no te cabrá la más mínima duda de estar transitando por el camino correcto. Por Elena Carrera

LOS SERES HUMANOS EMITIMOS LUZ !!

Los seres humanos emitimos luz, millones de estrellas nacen y mueren en el cuerpo a cada instante Escrito por Redacción. Publicado en Investigación y Ciencia inShare estamos-hechos-de-estrellas Es sin duda uno de los descubrimientos científicos más fascinantes del siglo XX. Alexander Gurwitsch, fue el que descubrió que los seres humanos emitimos luz. En 1923, Gurwistch, también descubrió que los campos morfogenéticos, emitían una luz ultra débil dentro del rango de la luz ultravioleta; llamó a esto "radiación mitogenética", al considerar que estaba relacionada con la división celular y el desarrollo morfológico del organismo; según Gurwistch la luz permitía que el campo morfogenético controlara el desarrollo embrionario. El descubrimiento, polémico y visionario, cayó mayormente en el olvido hasta que en la década de los setenta, el científico alemán Fritz Albert Popp lo retomara. Popp confirmó las observaciones de Gurwistch utilizando tecnología de "foto-multiplicación"ultra sensible y logró comprobar que el ser humano también emite luz, esto es lo que hoy se conoce como biofotones. Popp explica en 1986: "Prácticamente todos los organismos emiten luz a un ritmo estable desde unos pocos fotones por célula al día hasta varios fotones por organismo por segundo. Un creciente número de observaciones en los últimos 15 años en diferentes laboratorios en todo el mundo sugieren que los biofotones son emitidos por un campo coherente de fotones dentro de los sistemas vivientes. Los organismos son emisores y muy probablemente también receptores de señales electromagnéticas que parecen ser esenciales para su funcionamiento." La teoría de Popp sugiere que las células almacenan la luz del Sol y la luz que reciben de otros organismos y que el tiempo durante el que logran almacenar la luz está relacionado con la duración y la salud de la célula. Tenemos aquí las bases de un nuevo vitalismo. Lo anterior aplica también a la fuerza nutritiva que tienen los alimentos."Es muy probable que la calidad de la comida sea mejor cuanto mayor sea su capacidad de almacenar luz, y por eso medimos capacidad de almacenar luz", dice Popp. En un trabajo para un conferencia, junto con la bióloga Mae Wan Ho, Popp hace referencia a la concepción de la vida de Albert Szen-Gyorgi, que es considerado como el padre de la bioquímica moderna: "La vida es la interposición entre dos niveles de energía de un electrón: el estado base y el estado excitado y, más aún, ya que es el electrón el que recorre el circuito, la vida en realidad es una pequeña corriente eléctrica dando vueltas y conectando a toda la naturaleza con el Sol y la Tierra". La luz y la salud Esto parece coincidir con la idea del famoso físico austriaco Erwin Shrödinger, quien postuló que las células vivas conservan altos niveles de organización absorbiendo "orden" del ambiente y este "orden" es obtenido de la luz del Sol. A esta visión de la vida como la conexión electromagnética entre el Sol y todos los seres vivos, hay que añadir la también poética observación de Popp de que las células justo antes de morir incrementan su radiación biofotónica de manera exponencial, como si fueran supernovas. Millones de pequeñas estrellas mueren y nacen cada instante en nuestro cuerpo. Esto sugiere que una célula muere cuando pierde su capacidad de almacenar Observaciones subsecuentes, han hecho que Popp considere que el grado de organización coherente de la emisión biofotónica de un organismo se correlaciona con la salud del mismo. Células cancerígenas, por ejemplo, carecen de coherencia; personas con esclerosis múltiples absorben demasiada luz y tienen un exceso de coherencia; personas en estado de estrés igualmente emiten biofotones a ritmos acelerados en un esfuerzo por recobrar el equilibrio del organismo, el cual puede agotar las reservas de energía biofotónica en las células. El hijo de Fritz Popp, Alexander, en una entrevista explica la relación entre el cáncer y la coherencia de la luz vital del organismo: El cáncer es un fallo en la comunicación entre las células que determinan el ritmo de crecimiento de manera precisa... El cáncer es entonces un error de coherencia que ocurre en la comunicación que se lleva a cabo a través de la luz. Y esta falla de consistencia puede detectarse por una medición, como lo hemos hechos en tiempos recientes. Lo anterior nos sugiere que la salud es un estado de coherencia, es decir, de simetría y ritmo comunicacional entre las célulasque hablan un lenguaje de luz. En una investigación científica reciente publicada en Jornal Gerontology and Geriatic Research, Hugo Nigil concluye que "Una síntesis de la investigación biofotónica actual, sugiere que los fotones ultra débiles en las células son los portadores de toda la información dentro de las células y los organismos".Popp va más allá y sugiere que esta misma luz que parece orquestar los procesos metabólicos y el crecimiento del cuerpo es también lo que gobierna nuestra conciencia. Uno podría preguntarse si los resultados de la teoría de la relatividad están basados en un "mundo real" o en la conciencia y en sus interacciones con este mundo real. Esto tendría algunas consecuencias en el hecho de que la velocidad de la luz es considerada una constante natural fija. ¿Qué sucedería, por ejemplo, si las distancias entre los pares bases del ADN cambiaran? ¿Tendría esto un impacto en la velocidad de la luz? ¿Tal vez sea que la velocidad de la luz es constante ya que la luz es el factor que rige los procesos que determinan nuestra conciencia?. Fascinantes pregunta de Popp, que en este mismo artículo científico, se pregunta también si existe una relación, como la que ocurre entre el tiempo y la velocidad, entre el tiempo y la conciencia, siendo que a medida que envejecemos el tiempo pasa más rápido, quizás porque perdemos coherencia celular y capacidad de almacenamiento de fotones (recordemos que cuanto más cerca se esté de la velocidad de la luz más lento pasa el tiempo). A esto hay que añadir que la luz, ya sea que se comporte como onda o partícula en su extrañeza cuántica (siendo que al parecer existe como partícula sólo cuando es observada), es energía electromagnética pero a su vez también información. "La luz es energía pero también es información --contenido, forma y estructura. Es el potencial de todas las cosas", escribió el físico David Bohm. Donde hay información integrada, según el neurocientífico Cristof Koch, hay experiencia, lo cual es igual a conciencia. Tenemos aquí una posibilidad de resolver el llamado problema duro de la conciencia, que se encuentra enfrascado en la difícil tarea de explicar cómo surge la mente inmaterial de procesos meramente materiales: si la luz es en sí misma la conciencia o la protoconciencia este problema desaparecería, resolviendo el asunto de una manera no-dualista, ya que la luz --que no tiene masa y que sin embargo es un fenómeno físico-- parece ser el candidato perfecto para anular la dicotomía entre materia y espíritu. Tal vez los fotones, como los bits son las unidades básicas de información, sean de alguna forma unidades de conciencia. La mente está hecha de ondas y partículas de luz Todo lo anterior raya en un extremo poético, que se antoja digno de la idea de Novalis de que "todo arte debe de ser transformado en ciencia y toda ciencia en arte". E incluso en lo religioso, puesto que, no puedo resistir la tentación de mencionar la noción común a ciertas tradiciones esotéricas de que los practicantes avanzados logran transformar su cuerpo en luz y de esta manera alcanzan un estado de inmortalidad o de integración con la totalidad o la fuente misma de la vida. Tenemos la práctica taoísta de "regresar la luz" o hacer un cuerpo espiritual luminoso; el cuerpo vajra, cuerpo diamante, o cuerpo arco iris del dzogchen; la noción del místico sufí Ibn Arabi del "Hombre de Luz", "el cuerpo del paraíso" del cual se habla en el Zohar de los cabalistas y quizás también el cuerpo de la resurrección de Cristo. Escribe James Cross en el sitio Broad Speculations: Cuanto más organizadas y en fase estén dos ondas, más coherencia existe. Los laser emiten luz coherente. A nivel cuántico, las partículas pueden considerarse como ondas. Cuando las partículas actúan en fase la una con la otra tenemos el fenómeno llamado coherencia cuántica. La teoría de Penrose-Hammeroff es que la conciencia es una forma de coherencia cuántica que ocurre en el cerebro para crear la conciencia [...] Fotones y otras fuerzas electromagnéticas débiles interactuando con el substrato [cuántico] forman una infraestructura en red que coordina el crecimiento, división y la reparación [de las células]. La mente y la conciencia serían otra capa de estructura construida sobre los mecanismos de señalización ya presentes en la vida desde los primeros organismos unicelulares. La mente en este caso sería material y estaría hecha de ondas-partículas y de luz. El cuerpo de luz sería en cierto sentido literalmente verdad, no una metáfora o ilusión, pero no sería un segundo cuerpo. Sería nuestro verdadero cuerpo, el cual no es la masa de carne que creemos, sino, en realidad, una estructura cristalina y organizada de luz y materia. En el Dzogchen (Dzogchen es una antigua enseñanza espiritual desarrollada en el Tíbet dentro de la tradición budista tibetana. No pertenece a una escuela o sistema religioso) se habla de un proceso llamado phung po lhag med a través del cual el cuerpo humano se disuelve como tal y se convierte en un "cuerpo de luz" (od lus). El gran maestro del dzogchen, Longchen Rabjam escribe en uno de sus Siete Preciosos Tesoros, que una vez "que se han extenuado los elementos después de haber logrado la pureza primordial" y se han purificado "las sustancias internas y externas... en el caso del thod rgal, el adepto asume un cuerpo luminoso y alcanza el 'Gran Movimiento'". Sobre esto el académico Samten Karmay señala en su estudio clásico del dzogchen que esto es un signo de "el regreso a un estado primordial el cual se cree existe como una forma de luz". Tenemos aquí muchas ideas muy estimulantes y ciertamente no podemos llegar a conclusiones definitivas, pero podemos hacer una última conjetura: tal vez la llamada "iluminación", o el despertar que describe el budismo, es un estado de coherencia estabilizada en todas las células del cuerpo, el cual ocurre por una purificación de los elementos y que alcanza una especie de homeostasis de la luz almacenada en relación al ambiente. Fuente: Pijama Surf Foto: Daria Khoroshavina

luna nueva

LUNA NUEVA En las lunas nuevas (nos) sembramos, intencionamos y proyectamos.El día de la Luna Nueva es el mejor momento del mes para dejar el pasado y empezar a visualizar un nuevo mañana. Momento de Gestación.... Esta vez la Luna Nueva va a ser en Escorpio, signo de agua profunda, intensa. Este signo nos habla de transformación, renacer, reinventarse y recrearse; es la posibilidad de conectar con nuestro dolor mas profundo y zonas oscuras para emerger a lo nuevo y vital siendo conscientes de lo que somos. La Luna Nueva en Escorpio marca el comienzo de un período de cuatro semanas, en las que podremos volver a poner el contador a cero y resetear nuestras vidas. ¿Necesitas abandonar un hábito dañino, cambiar el chip o volver a empezar? ¡Hazlo ahora! El día de la Luna Nueva es el mejor momento del mes para dejar el pasado y empezar a visualizar un nuevo mañana. El mes lunar que viene marcado por este signo nos recuerda la necesidad de emprender un viaje a las profundidades del inconsciente. (De la Web)