miércoles, 30 de septiembre de 2015

DINERO MADRE Y VIDA SON ENERGIAS EQUIVALENTES

Dinero, madre y vida son energías equivalentes. Como tratamos a la madre, así nos trata la vida y el dinero. Los órdenes de la abundancia son los siguientes : Asentir a todo como es y a todos como son y agradecer todo como es y a todos como son, aunque todavía no entendamos. La abundancia es la respuesta del universo, del sistema familiar y del espíritu al que está al servicio de la vida, agradeciéndola como es, con la muerte y con el sufrimiento también. Nuestras vidas forman parte de grandes movimientos de compensación y de reconciliación. Es a lo que tenemos que asentir. El siguiente orden de la abundancia dice « tomar », tomar todo como es, tomar a todas las personas como son, formar parte del movimiento de la compensación de la vida, equilibrando el dar y tomar. El dinero que recibimos es la compensación a nuestro buen dar. El buen dar empieza con los padres : cuando « tomamos » a nuestros padres, o sea, cuando aceptamos recibir incondicionalemente todo lo que nos dieron nuestros padres, necesitamos devolver, por agradecimiento, pero a los padres no les podemos devolver lo mucho que nos han dado, por lo que instintivamente nos giramos hacia los demas, pareja, trabajo, y a ellos damos lo que tomamos de los padres. Esto es el buen dar. Y el entorno nos lo compensa y agradece con la abundancia. Tomar a la madre es contactar con el éxito y el dinero. Tomar al padre nos abre a la fuerza de la realización profesional Tomar a ambos a la vez permite que el éxito profesional fluya en nuestras vidas. Y este éxito está unido a la prosperidad económica. Tomar sólo un poco a los padres tiene como consecuencia no ser capaz de dar mucho a los demás, y por lo tanto la respuesta del universo será también pobre, mezquina. Tomar a todos como son significa tomar a todos los excluidos, rechazados, perpetradores y despreciados, de las dos ramas, que los conozcamos o no. Tomar a todos como son significa también querer a la gente difícil de nuestra propia vida, a los perpetradores económicos, a los prepotentes, a los tiburones y usureros, etc. y agradecerles ser como son. Y el último orden de la abundancia dice « respetar al anterior ». Resumiendo, nuestra abundancia está ligada a nuestra capacidad de amor incondicional y agradecimiento incondicional también. Se traducirá en nuestras vidas, primero por nuestro amor y respeto a la madre y a todas las mujeres de nuestro sistema familiar, y en segundo lugar por nuestro amor a los difíciles, rechazados, prepotentes, violentos y otras personas moralmente « incorrectas ». Ese amor tiene su reflejo en nuestra capacidad para decir « gracias por ser como eres » a cualquier ser humano. El dinero viene de la madre. En la madre, durante los primeros nueve meses de nuestra vida, hemos conocido la abundancia de la naturaleza y su imperfección. Al tomar conscientemente a nuestra madre, reanudamos el fluir de la abundancia en nuestra vida. En la pareja, observamos que la abundancia depende de la actitud de la mujer. Si la mujer respeta a su marido, el marido tendrá éxito y prosperidad.